«El mito sobrevive a través de sus símbolos».Paul Ricoeur
“¿Qué tiene éste tipo, que lo único que hizo fue ser un mago con la pelota ,para generar semejante conmoción mundial?” (Daniel Supervielle, periodista uruguayo)
Me encantó la pregunta … Lo llamativo es que el mismo periodista, como tantos académicos, e ilustres analistas, dicen no comprender bien lo que a ellos mismos les pasó con la muerte de Diego Maradona.. En éste caso, Daniel Supervielle, lloró durante dos ´días y se quedó en su casa a pintar cuadros de Diego sin comprender lo que a él mismo lo atravesó.…. “Yo que soy tan reacio a los sentimentalismos” dijo
Hay fenómenos populares que cuando querés analizarlos e investigarlos pierden su gracia decía Pipo Varela. Creo que es así cuando se usa la razón fría ; sin embargo hay otra racionalidad cálida que se debe atrever a entrar en ese universo del alma colectiva y nombrar lo que pasa. Para eso viene en ayuda la poesía y el arte y, sobre todo, el fragor de la calle.
Me ha llamado la atención la reiteración de testimonios de muchos profesionales del análisis que han “ confesado”, casi como un pecado, sentirse estremecidos . Tratan de conservar su supuesta objetividad pero confiesan que, durante éstos días de duelo, la “ perdieron” en algún rincón de su casa .
Tal vez tiene razón Laclau, el gran estudioso del populismo, cuando dice que hay un prejuicio sobre los fenómenos de masas: creer que las masas infantilizan, son irracionales. Por eso hay personas que se separaran de las modas masivas y populares más para huir del prejuicio que por genuino sentir. Además, claro, son especialmente temibles para sectores cuyos intereses (de toda índole, no sólo económicas) se sienten amenazados por la fuerza reivindicativa que pueden tener éstos fenómenos.
Separar al Diego deportista del humano , como escuché decir infinidad de veces, es empobrecer el fenómeno. Descuartizarlo para tranquilizar conciencias. Diego no es una ecuación. No hay forma de aprehenderlo en una autopsia racional. Diego es un arquetipo que emerge desde la noche de los tiempos en una cancha de fútbol.Con su vida,con su genio, con sus gestos y con sus contradicciones. Tiene un espesor simbólico que primero hay que sentir para poder luego apalabrar.
Los que se quedan en la racionalidad moral, individual, o lógica del fenómeno se pierden la fiesta, la gracia y la luminosa oscuridad de éste fenómeno plagado de señales humanas y sagradas…. Allá ellos. En algunos son evidentes los grandes esfuerzos para tapar con argumentos sus propias almas. Olvidarse de sus Fioritos y de las ganas de ser alguna vez un hijo pródigo. El típico reclamo de los limpitos… O de los fariseos en términos de Jesús.” Ni entran ni dejan entrar”
La historia avanza detrás de una “ pelota” que siempre se las ingenia para gambetear las resistencias: el alma de los pueblos….. Esa es la que Diego encarnó. La pelota que nunca manchó a pesar y gracias a todo su barro. “Gracias a la pelota” pidió Diego inscribir en su lápida de muerte. Siempre que habló de la pelota lo hacía en términos almáticos. Tanto, tantísimo más que una esfera de cuero.
Las canonizaciones populares generan cuerpos resplandecientes capaces de transmutar incluso lo abyecto. Es para mi gusto un evento sagrado digno de contemplar, necesario traducir y apacentar No sólo sentir, ni mucho menos solamente analizar. Son muchísimo más que mensajes políticos, de clase o coyunturales( sin excluirlo) Son símbolos destinados a de-velar el alma de los pueblos.
Te invito a una tertulia éste sábado sobre éste tema . Estaremos charlando con Pablo Giletta Amigo y compañero de muchos años cuya mirada humana, sensible y profesional siempre admiré Yo convido , además de mate espumoso, algunas llaves para responder la pregunta inicial ¿Que tiene éste tipo que conmocionó al mundo? Me gustaría conocer tu sentipensamiento.
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