Matías Peralta Proske tiene 23 años, y es autor de «Soy el Matías. Ni víctima ni premio de consuelo», un relato que busca visibilizar la realidad de los niños en hogares hasta los 18 años a través de su propia historia de vida.
En una entrevista radial expresó: «Mi historia comienza de los 0 a 5 años donde vivo con mi familia biológica. Nací en Santa Fe capital y en esos cinco años recibía violencia de todo tipo por parte de mi padre biológico. Me llevaba al cuarto y me cagaba a trompadas. Tenía un trasfondo, el me pegaba porque yo no sabía el abecedario. El cada vez que volvía de trabajar me preguntaba y yo tenía que saber decírselo. Sino era un castigo rotundo. Con cuatro años me preguntaba cuál era su obsesión con que le dijera el abecedario»
«Tuve un final feliz, pero tengo compañeritos en el hogar que no tuvieron esa posibilidad de ser hijos, de crecer en el seno de una familia. O incluso en pleno 2025 sigo escuchando historias de personas que están esperando que los adopten, tienen 16 años y están esperando por una familia. Voy a los hogares y sigo viendo chicos de todas las edades. Es una realidad que a día de hoy sigue estando y es triste verla. Hay alrededor de 10 mil chicos en total en Argentina. En Santa Fe, hay alrededor de 1000 y pico y seguramente la mitad o menos esté declarado en estado de adoptabilidad. Esto quiere decir que estás en el padrón para ser elegible por una familia que desee adoptar»
A pesar de ello, Matías destaca el cambio en la legislación: «Las leyes cambiaron y para bien. Antes se trataban a los chicos como si fuesen delincuentes, ahora no. Pasa muchas veces que es a interpretación humana y por arrastre se sigue priorizando los vínculos biologicistas o sanguíneos y no escuchar al niño»
Es una gran alaegría poder compartir la charla con Matías y seguir conociendo su vida…
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